"La inflación en Venezuela es caprichosa, la podemos medir hacia el pasado, lo que ha sucedido, pero como es caprichosa no la podemos proyectar hacia el futuro, sino que depende del señor que está detrás de la tecla de una computadora que le pone valor a la relación bolívar dólar todos los días", afirmó Boza, conductor del programa Boza con Valdez, transmitido por el canal estatal Venezolana de Televisión.
Sin embargo, Boza cree que esas predicciones son inciertas porque en Venezuela la inflación no está asociada a ninguna matriz económica que explique la situación, a diferencia de otras naciones que tienen un exceso de demanda o una contracción de la producción.
"Hiperinflación con estanflación"
"Aquí hay una hiperinflación que está asociada a un proceso de estanflación, hay estancamiento y al mismo tiempo inflación, ¿hasta dónde puede llegar? Desde el plano de la ciencia económica es difícil de calcular porque está sujeto al capricho de un ciudadano que está detrás de una página web", reiteró.
Esto se realiza a través de un mercado considerado como ilegal en Venezuela y que, incluso, puede llevar a prisión a quienes interactúan con él, pues desde el año 2003 en esta nación rige un control cambiario, que otorga al Estado la potestad de comprar o vender cualquier divisa.
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Por ello, Boza insiste que en Venezuela no existe una hiperinflación clásica, sino que tiene dos componentes: uno estructural, que tiene que ver con que en el país no hay un mercado de divisas, con una confluencia de demandante y de oferente, y el otro es que no existe un punto de equilibrio entre oferta y demanda.
Sin embargo, desde el año 2015 la principal empresa del país Petróleos de Venezuela S.A ha enfrentado una situación compleja, debido a la abrupta caída de los precios del crudo, así como escándalos de corrupción y desfalco.
En medio de esta situación, la producción de barriles de petróleo en Venezuela ha registrado una caída casi mensual, pasando de más de dos millones de barriles diarios a 1,39 millones, de acuerdo al último informe de la Organización de Países Exportadores de Petróleo.
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Esta situación, de acuerdo a la explicación de Boza, es solo uno de los factores que inciden en la inflación porque al bajar el precio del crudo y caer la producción entran menos dólares a Venezuela, lo que provoca una disminución en la cantidad de divisas que se otorgan para la producción.
Boza explica que aunque el Gobierno lograra aumentar en un millón de barriles más la producción de crudo, como ha propuesto el mandatario, no se garantizaría que la inflación se detenga.
"Si aumenta la producción petrolera es obvio que aumentarían los ingresos al país, pero eso no es determinante en la inflación", indicó.
Aunado a la manipulación del valor del dólar y a la reducción de la exportación petrolera, Boza habló de otro de los "males" que ha caracterizado al sector productivo venezolano, que ha sido calificado por el propio Gobierno como "rentista" o "parasitario".
"En Venezuela el modelo productivo dependiente del petróleo ha hecho que el sector privado no haya producido si no apenas un uno por ciento de las divisas que se producen en el país", afirmó.
El alza exorbitante de precios en Venezuela es una situación que ha pasado de ser mensual o semanal a diaria.