"México reitera que la negociación del TLCAN no debe estar sujeta a condicionamientos ajenos al proceso", dijo en un comunicado la secretaría federal de Economía, que encabeza Ildefonso Guajardo, jefe negociador del pacto comercial norteamericano.
La postura del país latinoamericano fue emitida horas después de que el gobierno del presidente Donald Trump anunció una serie de medidas para restringir sus importaciones globales de acero y aluminio, con la imposición de aranceles de 25 y 10%, respectivamente, que excluye a México y Canadá.
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En los últimos 20 años, la industria del acero y aluminio de América del Norte ha logrado un alto grado de integración, al grado que "los tres países de la región nos hemos convertido en los principales proveedores y compradores del acero norteamericano".
Hace más de dos años, ante el exceso de capacidad en la producción global de acero, México tomó medidas "oportunas y efectivas" para defender a su planta productiva siderúrgica, incrementando los aranceles hacia los países generadores de esa sobrecapacidad, reseñó la respuesta oficial sin mencionar a China.
Estrategia regional noerteamericana
El Gobierno mexicano estima que esas acciones le permitieron reorientar sus importaciones de acero a la región de América del Norte.
México reconoce al mismo tiempo que existen "problemas de exceso de capacidad en la industria de acero a nivel global".
Ante esa realidad del mercado mundial planteó que "seguirá trabajando en la búsqueda de una solución de largo plazo".
Para ese objetivo, el país latinoamericano "participará en el marco de los foros que abordan estos temas de manera específica".
Esos foros son el Comité de Comercio de Acero de América del Norte, el Comité de Acero de la OCDE, y el Foro Global sobre Exceso de Capacidad del Acero.
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La exoneración de México y Canadá de la política arancelaria en esos productos ocurrió un día después de que el asesor de la Casa Blanca, Jared Kushner, acordó con altos funcionarios mexicanos que una posible reunión de Trump con su homólogo mexicano Enrique Peña Nieto, dependerá de los acuerdos bilaterales y comerciales alcanzados en negociaciones.
Esos acuerdos estarán "vinculados con la relación integral, incluyendo el TLCAN (Tratado de Libre Comercio de América del Norte) y otros temas en materia de seguridad, migración y cooperación económica", dijo la cancillería tras una reunión de Kushner con Peña Nieto.
Trump intentó vincular las tratativas comerciales trilaterales a su nueva política arancelaria en el acero y el aluminio, y exigió a México acciones en el combate al crimen organizado.
Los tres países renegocian el TLCAN en vigor desde 1994, a instancias de Trump que lo considera que es el pero acuerdo en la historia de EEUU.