"La decisión de Trump fue muy importante, EEUU tuvo el coraje y el juicio de escribir este acontecimiento histórico: reconocer a Jerusalén como capital de Israel", afirmó el diplomático en el Consejo de Seguridad.
"Jerusalén tiene hoy más libertad para todas las religiones que en cualquier otro tiempo de la historia", afirmó, y destacó que esos valores estaban consagrados en la declaración de independencia de Israel.
El 6 de diciembre, Trump anunció que su administración reconocía a Jerusalén como capital del Estado de Israel, y ordenó al Departamento de Estado (cancillería) que iniciara el proceso para trasladar la Embajada de Tel Aviv a esa ciudad.
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Israel considera que Jerusalén, incluidos los barrios orientales que reclaman los palestinos, es su capital "única e indivisible".
Por el momento, todas las embajadas extranjeras se encuentran en Tel Aviv para evitar tomar parte en la disputa entre israelíes y palestinos.
