Poco antes el periódico The Washington Post aseguró que Washington pretende mantener su contingente militar en Siria después de la derrota del grupo terrorista Daesh, proscrito en Rusia y muchos otros países, y establecer un nuevo Gobierno en el norte del país.
"Todos comprenden perfectamente que con la retirada de nuestro contingente los estadounidenses obtendrán un control total del espacio aéreo no solo de Siria, sino de Irak, Jordania, Turquía (pues se trata de un país de la OTAN), sin haber hecho ni un solo vuelo, sin ningún combate en el aire", dijo el senador.
Bóndarev destacó que a ese territorio se le puede agregar el de Arabia Saudí, aliado de EEUU, y el dominio estadounidense se extenderá hasta la costa de la península Arábiga.
El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, aseguró a mediados de este mes que la voluntad de permanecer en Siria después de la derrota de Daesh pone en duda los verdaderos objetivos de Washington en el país árabe.
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Lavorv recordó que su homólogo estadounidense, Rex Tillerson, afirmó en varias ocasiones que el único objetivo que persigue EEUU en Siria consiste en derrotar a Daesh.
Relaciones bilaterales
El senador ruso, Víctor Bóndarev, declaró que la cooperación de Rusia con EEUU no es constructiva.
Según Bóndarev, EEUU frecuentemente hace algo completamente contrario a lo que propone Rusia, en lugar de prestar ayuda o apoyar a Moscú en la solución de algunos problemas.
El político señaló que las barreras al diálogo constructivo entre los dos países no las crea Moscú.
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Las relaciones entre Moscú y Occidente sufrieron un profundo deterioro tras la reincorporación de Crimea a Rusia en marzo de 2014 en virtud de un referendo que culminó con un aplastante sí y por el conflicto armado interno en el este de Ucrania que estalló aquel mismo año.
EEUU, la Unión Europea y otros países aprobaron varios paquetes de sanciones contra Rusia, que respondió con un embargo a las importaciones agroalimentarias provenientes de esos países.
Moscú ha señalado reiteradamente su disposición a normalizar las relaciones con Washington, sin embargo, tuvo que constatar recientemente que un diálogo normal con EEUU brilla por su ausencia pese a que Rusia siempre está preparada a cooperar de igual a igual.