"Tras haber sufrido una derrota en la construcción del califato en Siria e Irak, los líderes de Daesh y las organizaciones terroristas internacionales aliadas tienen como objetivo global crear una nueva red terrorista mundial", dijo el jefe del FSB, general Alexandr Bortnikov, en una reunión de los organismos policiales y socios extranjeros.
"Los jefes del terrorismo internacional perdieron el control de grandes territorios, muchos puestos avanzados y varias regiones petrolíferas, se redujo considerablemente su base económica en Oriente Medio con la que financiaron no solo a grandes grupos armados en esta región, sino también a sus partidarios en el exterior", dijo.
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"Este año son cientos las víctimas de los ataques perpetrados en Afganistán, Siria, Irán, Irak, Egipto, Malí, Turquía, Rusia, el Reino Unido, España, Suecia, Finlandia y otros países", indicó.
Asimismo señaló que los terroristas buscan demostrar a sus seguidores y patrocinadores la vitalidad y la capacidad de emprender nuevas acciones.
"En la actualidad, los terroristas redistribuyen las fuerzas y los medios disponibles, se están extendiendo deliberadamente fuera de Oriente Medio, se concentran en regiones inestables con el objetivo de crear nuevos focos de tensión y conflictos armados", concluyó el director del FSB.