"Claramente se puede evidenciar un cambio de postura desde que Donald Trump asumió con respecto a la política que llevó adelante el presidente Obama; hay que ver hasta dónde está dispuesto a llegar Trump" con sus políticas hacia Cuba, comentó Tarud.
La medida se adoptó tras los supuestos "ataques sónicos" que habrían afectado a algunos funcionarios estadounidenses en Cuba, los cuales habrían dejado a más de una veintena de ellos con distintos daños auditivos y cerebrales.
"Las decisiones que toma Trump en sus relaciones bilaterales dependen de él, y por los antecedentes que han aparecido en la prensa no es posible decir quién tiene la culpa [de los supuestos ataques sónicos], pero esto marca claramente una diferencia de posturas del Gobierno estadounidense hacia la isla", indicó Tarud.
"Barack Obama tuvo una política de acercamiento hacia Cuba, se abrieron las embajadas y se promovió la eliminación de las restricciones y el boicot, ahora, después de esto, las relaciones entre Cuba y EEUU comenzarán a deteriorarse", afirmó.
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Tras casi 56 años de hostilidades y retórica belicista por parte de Estados Unidos, la normalización de las relaciones entre Cuba y ese país comenzó a asentar sus bases en diciembre de 2014, con la decisión de reabrir sus respectivas embajadas en Washington y La Habana.