"El despliegue del sistema THAAD en el noreste de Asia es una grave amenaza para el equilibrio estratégico regional y socava los intereses de seguridad de todos los países de la zona, incluida China", dijo Lui en la reunión de urgencia del Consejo de Seguridad de la ONU tras la prueba balística que Pyongyang realizó este martes.
"El despliegue militar en la península no favorece al logro de la desnuclearización y la estabilidad regional", insistió.
El diplomático instó además a terminar con la política de imponer sanciones unilaterales contra personas y organizaciones en terceros países.
En julio de 2016, EEUU logró un acuerdo para desplegar en territorio surcoreano una batería THAAD (por las siglas en inglés de Defensa Terminal de Área a Gran Altura) que se estará operativa a finales de 2017.
El sistema está diseñado para detectar misiles balísticos e interceptarlos a una altitud de entre 40 y 150 kilómetros.
Tanto Seúl como Washington afirmaron reiteradamente que el THAAD solo pretende contrarrestar la amenaza norcoreana, pero Pekín y Moscú sospechan que en el fondo EEUU busca aumentar su presencia en la zona y monitorear sus defensas.