"Existe el riesgo de que las compañías alemanas se vean perjudicadas al no coordinar Estados Unidos sus sanciones con Europa", advirtió la ministra alemana de Economía y Energía, Brigitte Zypries, en una entrevista con la televisión local.
Zypries indicó también que las nuevas sanciones complicarán las relaciones con Washington.
Por su parte, el gremio empresarial de Alemania advirtió que las nuevas sanciones antirrusas de Estados Unidos hacen peligrar la construcción de los gasoductos europeos.
"Las sanciones estadounidenses amenazan no solo la construcción de Nord Stream 2, sino también de otros gasoductos", alertó Michael Harms, director general del Comité alemán para las relaciones económicas con Europa del Este, un organismo que aglutina a las empresas y bancos alemanes con presencia en esta región.
El alto ejecutivo calificó de "inaceptable" la política de Washington respecto al mercado energético de Europa.
Añadió que es inaceptable la politización del proyecto del gasoducto Nord Stream 2 por la Comisión Europea y algunos países de Europa.
"Estamos categóricamente en contra de la politización del Nord Stream 2 por la Comisión Europea y varios países europeos", dijo al añadir que el gasoducto contribuirá a la seguridad energética del continente.
La normativa aún debe pasar por el Senado y la Casa Blanca.
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En la mira estarían los cinco gigantes energéticos europeos ENGIE, OMV, Shell, Uniper y Wintershall que a finales de abril firmaron sendos acuerdos con la compañía rusa Gazprom para financiar el 50% de la infraestructura, evaluada en 9.500 millones de euros.