Se aferran a la máxima del alemán: "Una mentira repetida mil veces, se convierte en una verdad". Y así, con acusaciones infundadas, sin pruebas presentadas, en el mejor de los casos, o inventadas en un montaje propio de Hollywood, penalizan. Porque sí. O porque ven que sus metas se alejan, más bien.
Lo que sí presentó el ministro francés de Asuntos Exteriores, Jean-Marc Ayrault, ante el Consejo de Seguridad de Francia, fue el resultado de unas "investigaciones" sobre el insuceso de Jan Sheijun. El diplomático francés afirmó que en el presunto ataque, el Gobierno de Asad utilizó gas sarín, supuestamente fabricado en un centro sirio de investigaciones científicas.
Este informe fue calificado por el Ministerio de Exteriores de Siria como parte de la "campaña de engaños y mentiras" contra Damasco. También el Gobierno ruso se pronunció: Moscú cuestionó la autenticidad de las muestras de gas sarín tomadas por los servicios secretos de Francia en la región de Jan Sheijun.
"Si los servicios secretos franceses tomaron ellos mismos esas muestras, significa que tenían acceso libre a esa región controlada por los grupos de la oposición siria vinculados con Al Qaeda", indicó la Cancillería rusa.
Y amparado en la farsa y en unas imágenes fantasma sobre presuntos damnificados del presunto ataque con agentes químicos, sumado a la sensiblería de Ivanka Trump ante dichas instantáneas de dudosa autenticidad, el presidente Donald Trump decidió golpear a Siria 59 veces con sus misiles. ¿Y el Derecho Internacional? Bien, gracias.
El analista internacional Adnan Ezzedine explica que "hoy en día Europa es el eco de cualquier decisión que tome EEUU. Ante cualquier llamamiento (de EEUU) a intervenir en cualquier país, Europa se apunta al 'sí', nunca al 'no' intervenir".
"Esta acusación falsa (de la Unión Europea), viene porque el Ejército sirio está avanzando muchísimo en el terreno, y sabemos perfectamente que ahora en terreno sirio hay fuerzas de EEUU, del Ejército turco, hay franceses, ingleses, holandeses. Por lo cual esos avances (del Ejército sirio) preocupan a esas fuerzas, cuya estrategia es la división de Siria. (…) Y entonces empiezan a acusar a Siria", apunta el analista.
Adnan Ezzedine observa que "cuando el Ejército sirio hizo el acuerdo con EEUU para destruir las armas químicas, fue inmediatamente ejecutada, vigilada por Naciones Unidas, por la OPAQ, quienes establecieron en un informe que Siria ya no tiene armas químicas. Entregó todo. Entonces eso (de las nuevas sanciones) es nada más que la preparación de una próxima intervención (de la UE en Siria)", sentencia Adnan Ezzedine.
