"Esperemos que no los haya. (…) De lo contrario, aquellas 70 personas fallecidas en los disturbios podrían parecer los primeros balbuceos de un bebé", comentó Jéifets.
En este contexto, la oposición está intentando involucrar en el conflicto al Ejército. Por lo tanto, el ataque contra el Tribunal Supremo de Justicia y el Ministerio del Interior de Venezuela no puede ser considerado como una intentona golpista, señaló a Sputnik Mijaíl Beliat, experto en países de América Latina y profesor de la Universidad Estatal Humanitaria de Rusia.
"Esto no es un golpe de Estado, ni siquiera un intento de golpe, sino una propaganda muy seria, que tenía como objetivo involucrar al Ejército en la situación en el lado de la oposición", declaró.
"Sabemos que la sociedad venezolana, desde 2013, está dividida aproximadamente por la mitad. El Ejército y la Policía son los que pueden hacer pesar más a una u otra parte del conflicto. Por lo tanto, los intentos de involucrar al Ejército al lado de la oposición continuarán. Mientras sigan fieles a Maduro, el poder estará en sus manos", explicó.
El especialista no excluyó la posibilidad de injerencia en el conflicto de una tercera parte.
"El Gobierno de Venezuela ya ha declarado que todo esto sucedió con la participación de la Embajada de EEUU y el Departamento de Estado. (…) Pero todavía no se ha demostrado que estas instituciones estén involucradas en lo que está ocurriendo en Venezuela", observó.
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Asimismo, Beliat admitió que hay peligro de que una situación semejante surja en Bolivia y Ecuador.
"Este riesgo existe porque vemos que la izquierda latinoamericana, creada en los últimos años, está desapareciendo, por ejemplo, en Argentina y Brasil. También están bajo amenaza Bolivia y Ecuador", señaló.
En este contexto, es posible conseguir la paz en Venezuela solo por medio de un diálogo entre la oposición y el Gobierno, añadió el experto.
