Arabia Saudí, los EAU, Bahréin y Egipto rompieron las relaciones con Catar a comienzos de este mes de junio, al imputarle el apoyo al terrorismo y la desestabilización de la situación en la región.
"Los planteamientos de los Estados que rompieron las relaciones con Catar están relacionados, en particular, con problemas como la financiación del radicalismo y de los grupos terroristas, por ejemplo, en Siria y Libia, y la ayuda a las personas non gratas", dijo Gargash agregando que fue publicada una lista de 59 de estas personas, incluidas 14 buscadas por EEUU, nueve por la ONU y cinco por la UE.
También exigió que Doha deje de apoyar al movimiento palestino Hamás y a los Hermanos Musulmanes (grupo terrorista proscrito en Rusia).
El canciller criticó también al canal de televisión catarí Al Jazeera, afirmando que actuó como portavoz de los Hermanos Musulmanes durante los últimos 10 años.
"Si Doha quiere recuperar su entorno de siempre, deberá guiarse por las normas de transparencia en su conducta y dejar de apoyar el radicalismo y a los grupos terroristas", subrayó.
