"Parece que EEUU ha dividido para sí mismo a Siria, determinó allí sus zonas de influencia y ahora no permite a nadie pasar", señaló Tarásov en una entrevista con Sputnik, al comentar el incidente con el Su-22 sirio derribado por las fuerzas de la coalición internacional liderada por Washington.
En su opinión, esto no tiene nada que ver con las zonas de desescalada en Siria, que se establecieron en las conversaciones en Astaná sostenidas en enero de este año entre Rusia, Irán y Turquía. "Los estadounidenses expresaron su apoyo al acuerdo, pero no se unieron. De eso se desprende su postura vaga", enfatizó.
"Los estadounidenses creen que será una batalla sangrienta y no debemos esperar allí victorias rápidas. Al mismo tiempo, hemos comprobado que ellos aprovechan esta situación, y elaboran rigurosamente un escenario para fragmentar a Siria", concluyó Tarásov.
La coalición internacional encabezada por Estados Unidos derribó el 18 de junio un avión de la Fuerza Aérea Árabe Siria, en la región de Al Raqa. Damasco declaró que la aeronave participaba en la operación que llevan a cabo las milicias y el Ejército gubernamental contra Daesh, organización terrorista proscrita en Rusia y otros países.