"Vuelvo a exigir que se levanten las sanciones injustas dirigidas contra el pueblo sirio que han impedido e impiden restaurar la industria local, sobre todo, la farmacéutica", afirmó Diab en una videoconferencia Moscú-Ginebra bajo el lema "Alepo: una ciudad sin terror. Nueva vida, nuevas esperanzas".
Agregó que las medidas restrictivas obstaculizan la renovación de los centros públicos de asistencia social de la provincia.
Además, Diab agradeció a la policía militar rusa su "rol principal para superar las consecuencias de la guerra tras la liberación de la ciudad".
A finales de mayo la Unión Europea prolongó hasta el 1 de junio de 2018 las limitaciones unilaterales que pesan sobre Siria desde diciembre de 2014.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto armado que ha causado entre 300.000 y 400.000 muertos, según datos de la ONU.
Las tropas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas, entre ellas Daesh (autodenominado Estado Islámico) y el Frente al Nusra, ambas prohibidas en Rusia y otros países.