Las leyes japonesas sobre la seguridad, que entraron en vigor el 29 de marzo de 2016, extienden las posibilidades para recurrir a las Fuerzas de Autodefensa, incluyendo su uso en el extranjero y para la protección de los aliados.
De acuerdo con el periódico, se planea reconocer la caída de un misil de Corea del Norte en aguas japonesas como una situación que represente una clara amenaza de un ataque armado.
En tal caso, las Fuerzas de Autodefensa de Japón podrán ser desplegadas en la línea del frente, indica Yomiuri Shimbun.
Sin embargo, según una fuente gubernamental citada por el diario, "es difícil imaginar que Corea del Norte inicie ahora una amplia ofensiva armada".
El pasado domingo, en medio de plena tensión con Washington, Pyongyang intentó lanzar un misil balístico que explotó segundos después de ser accionado, según informaron funcionarios de Defensa de EEUU y de Corea del Sur.
Desde 2006, Corea del Norte ha realizado cinco ensayos nucleares y múltiples lanzamientos de misiles balísticos desoyendo la prohibición de la ONU.
Algunos de esos misiles cayeron en el mar dentro de la zona económica exclusiva de Japón.