"Es un nuevo nivel de amenaza", así comentó los recientes ensayos norcoreanos el premier nipón, Shinzo Abe.
"Actualmente, estamos examinando lo que habría que hacer para enfrentar la situación, si el enemigo lanzara un misil que alcance el territorio de Japón. Debo enfatizar que nuestra respuesta estaría destinada a prevenir el segundo o el tercer ataque. En otras palabras, no es un ataque preventivo lo que estamos estudiando sino un contrataque…", explicó Itsunori Onodera, el extitular de Defensa de Japón.
Esta discusión se mantiene por parte de otros estadistas y analistas nipones, quienes insisten en que el país se ve obligado a reinterpretar la famosa cláusula pacifista de la Carta Magna japonesa.
Pero aún pese a que el propio Donald Trump reiteró el compromiso de Washington a defender a su principal aliado asiático al 100%, en Tokio reina una lógica incertidumbre sobre la determinación de la Casa Blanca de meterse en un conflicto en la península coreana, teniendo en cuenta las armas nucleares desplegadas a lo largo de Corea del Norte, lo que hace imposible que EEUU las destruya a la vez, según Narushige Michishita, profesor japonés citado por el medio.
Mientras tanto, Narushige Michishita subraya la amenaza que representa para Japón otro misil balístico de alcance medio norcoreano, 'Nodong'.
"Su alcance es de 1.300 km. Una vez lanzado, alcanzaría a Japón en unos 10 minutos. Es decir, estamos a su alcance", advirtió el profesor.