"Egipto sigue con preocupación la crisis de Jan Sheihun, donde murieron decenas de civiles intoxicados por un gas prohibido, y el desarrollo de los acontecimientos posteriores", se señala en el documento.
En la madrugada del 7 de abril, EEUU lanzó 59 misiles de crucero Tomahawk desde los buques de guerra emplazados en el Mediterráneo contra la base aérea de Shairat, en la provincia de Homs, afirmando infundadamente que el ataque químico a la ciudad de Jan Sheijun se lanzó desde esta base siria.
De acuerdo con el gobernador de Homs, esta operación de EEUU causó siete muertos, incluidos dos civiles, mientras que el Ejército sirio informó de diez militares abatidos.
La Coalición Nacional para las Fuerzas de la Oposición y la Revolución Siria denunció el martes pasado que el ataque químico causó 80 muertos y más de 200 heridos y cargó la responsabilidad a las tropas gubernamentales.
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Los altos mandos del Ejército sirio rechazaron decididamente estas acusaciones y responsabilizaron del ataque a los extremistas y sus patronos.