"Ha llegado el momento de que la comunidad internacional ponga coto a los crímenes del régimen sirio", afirmó el diplomático en una reunión del Consejo para analizar la situación en Siria luego del ataque con armas químicas reportado en la provincia de Idlib (noroeste).
"Esto demuestra trágicamente la locura destructora del régimen de Bashar al Asad", afirmó el diplomático, y subrayó que "mientras no haya transición política creíble nada podrá garantizar la paz para el pueblo sirio".
Por tanto, Delattre propuso al Consejo aprobar un proyecto de resolución que sancione a Damasco, para así "rechazar lo inaceptable".
"La inacción y el inmovilismo no pueden ser opciones", afirmó.
Más tarde, los medios informaron que el hospital que atendía a los heridos del ataque tóxico fue bombardeado y considerablemente dañado.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto armado que ha dejado entre 300.000 y 400.000 muertos, según datos de la Organización de las Naciones Unidas.
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Las tropas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas, entre ellas Daesh (autodenominado Estado Islámico) y el Frente al Nusra, ambas proscritas en Rusia y otros países.
