En su opinión, de construirse la minera en la comuna norteña de La Higuera, la región podría enfrentar problemas en sus relaciones sociales, en el medio ambiente o pérdida de credibilidad en los inversionistas o el aparato público encargado de regular la actividad productiva.
La autoridad fue la responsable de decidir sobre el futuro de la mina de hierro y cobre, tras el empate que resultó de la votación de los doce organismos técnicos que componen la Comisión de Evaluación Ambiental.
Con seis votos a favor y seis en contra, la Resolución de Calificación Ambiental del proyecto que supone una inversión de 2.500 millones de dólares, fue finalmente rechazada.
Por otra parte, valoró la importancia de la minería en la historia de la región y los efectos positivos en materia económica, comercial, productiva, social y cultural que ha traído a la zona.
La firma privada declaró que apelará la decisión al Consejo de Ministros en 30 días y no descartó que la inhabilitación tenga relación con las inversiones de la familia del expresidente Sebastián Piñera (2010-2014) en el proyecto, entre 2009 y 2010.
En dicho período, la familia del exmandatario era una de las principales accionistas de Andes Iron, cuando recién se gestaba la iniciativa Dominga, a través de su empresa Bancard.
Actualmente, la justicia investiga a Piñera por supuestamente haber favorecido las inversiones de su familia mientras era presidente, al detener la construcción de la Central Termoeléctrica Barrancones en la misma comuna de La Higuera, en agosto de 2010.
La defensa del exjefe de Estado apunta que él no tenía conocimiento de estos negocios y que se desligó completamente de la administración de sus empresas para dedicarse a la labor presidencial.
Dominga, que espera la venia del Gobierno hace tres años, crearía alrededor de 9.800 empleos en su período de construcción y 1.450 al entrar en operación.
La compañía además estimó que la producción de la mina alcanzaría los 12 millones de toneladas de hierro al año.