Su padre, Lamine Diack, además de presidente de la IAAF era miembro del Comité Olímpico Internacional (COI), por lo que hay indicios de que ese dinero habría servido para influenciar a otros miembros del COI para que decantasen su voto hacia Río.
En la actualidad Lamine Diack está detenido en Francia acusado de blanqueo de dinero y su hijo ha sido apartado del mundo del atletismo.
Según Le Monde el supuesto depósito irregular se realizó tres días antes de la elección de la sede olímpica, realizada en un acto el 2 de octubre de 2009 en Copenhague.
A ese acto asistieron entre otras autoridades de la comitiva brasileña el entonces presidente Luiz Inácio Lula da Silva y el exgobernador del estado de Río Sérgio Cabral.
Las autoridades judiciales francesas sospechan que la trama de corrupción que forjó alrededor de su gobierno también sirvió para comprar votos que garantizasen la elección olímpica.
Las ciudades que disputaban con Río de Janeiro el albergar los JJOO de 2016 eran Tokio, Chicago y Madrid; esta última fue la que pasó a la última ronda, aunque la ciudad brasileña se impuso con un amplio margen, 66 votos contra 32.