"Ahora estamos examinando la situación (…) y enviaremos el convoy en cuanto la seguridad lo permita", dijo.
Destacó que los desconocidos armados que atacaron la caravana se robaron una parte de la ayuda humanitaria.
Detalló que los organismos humanitarios tuvieron garantías de seguridad de ambas partes del conflicto sirio pero el intento de alcanzar Al Waer, el último distrito de Homs controlado por los radicales, fracasó.
A su vez, la oficina regional del CICR en Damasco comunicó que el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) seguirá exigiendo que sus empleados tengan acceso permanente a todos los poblados sirios que necesitan ayuda humanitaria.
"Seguiremos exigiendo un acceso permanente, sea al barrio de Al Waer o cualquier otro lugar en Siria donde se necesita ayuda urgente", comentó la oficina regional en su cuenta de Twitter.
El ataque, según la fuente, se saldó con varios muertos y heridos entre militares sirios y civiles, siendo la tercera vez seguida que el convoy para Al Waer sufre un ataque terrorista.
"Los vecinos de Al Waer no han recibido ayuda desde hace cinco meses… Se debe diferenciar entre la ayuda y los intereses político-militares, los trabajadores humanitarios deben ser protegidos", indicó la oficina del CICR en Damasco.
Siria vive desde marzo de 2011 un conflicto armado que ha dejado entre 300.000 y 400.000 muertos, según datos de Naciones Unidas.
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Las tropas gubernamentales se enfrentan a grupos armados de la oposición y a organizaciones terroristas, entre ellas Daesh (autodenominado Estado Islámico) y Frente al Nusra, ambas proscritas en Rusia y otros países.