La cifra de manifestantes ofrecida por las autoridades coincide con el número de inscritos para la protesta anunciado previamente por las entidades soberanistas convocantes, la Asamblea Nacional Catalana (ANC), Òmnium Cultural y la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI).
Los encausados llegaron al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña en una marcha que arrancó desde la sede del Gobierno catalán y que contó con la asistencia de destacadas personalidades políticas catalanas de todos los partidos favorables al derecho a decidir.
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El apoyo institucional a los encausados estuvo encabezado por el actual presidente catalán, Carles Puigdemont, y por la presidenta del Parlamento catalán, Carme Forcadell.
Además, los 40.000 manifestantes entonaron el himno catalán "Els Segadors" en las puertas del juzgado.
En opinión de Jordi Sánchez, presidente de la ANC, la sociedad catalana demostró en la concentración "que no le gustan los tribunales como solución a los problemas políticos".
"Hoy el Gobierno ha podido entender que la mayoría del país quiere democracia y diálogo", apuntó Sánchez.
Por su parte, la vicepresidenta del Tribunal Constitucional, Adela Asúa, defendió la independencia y profesionalidad de los magistrados del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña para no dejarse influir por las concentraciones en las puertas de la corte.
En la consulta soberanista del 9 de noviembre de 2014, que no contaba con reconocimiento alguno por parte del Estado español, participaron 2,3 millones de personas, de las que un 80,76% votó a favor de la independencia de Cataluña.