Según el comunicado estadounidense, los dos líderes durante una conversión telefónica abordaron la situación en el Oriente Próximo, en particular la lucha antiterrorista y los esfuerzos conjuntos para resolver el conflicto en Yemen.
"El presidente propuso la idea de apoyar la creación de zonas de seguridad para los refugiados desplazados por el conflicto, y el príncipe heredero acordó apoyar esta iniciativa", informó la Casa Blanca.
Yemen es escenario de violentos enfrentamientos desde 2014 entre los rebeldes hutíes del movimiento Ansar Alá y los partidarios del expresidente Alí Abdalá Saleh, por una parte, y las fuerzas leales al presidente legítimo Abdo Rabu Mansur Hadi, por otra; estas últimas son apoyadas desde marzo de 2015 por una coalición de países del Golfo Pérsico y África del Norte liderada por Arabia Saudí.