"Apoyamos la idea de una mesa redonda que debe incluir la delegación gubernamental y otros grupos de las plataformas que incluyen a la oposición armada si empieza a implementar el acuerdo de Astaná y empieza a luchar contra Daesh y el Frente al Nusra", dijo.
Subrayó que todas las partes del conflicto sirio, así como la sociedad civil, deben participar en las consultas.
Las consultas de Astaná se desarrollaron a puertas cerradas el 23 y el 24 de enero, con la asistencia de representantes del Gobierno de Siria y de la oposición armada, así como diplomáticos de Rusia, Turquía, Irán, Kazajistán, EEUU y la ONU.
La celebración del encuentro, junto con la tregua declarada a finales del año pasado, es parte de un paquete de iniciativas de mediación de Rusia y Turquía apoyadas por el Consejo de Seguridad de la ONU en su resolución 2336.