Según el diputado, "Moscú saludaría la desunión de Occidente".
Erler recordó que la puesta en práctica de los acuerdos de Minsk "sigue siendo deseable pero transcurre con éxito variable" y señaló que de momento los primeros tres artículos del acuerdo —el cese de hostilidades, la retirada de armas pesadas y el control por parte de la OSCE— siguen sin respetarse.
"Desde la óptica de la UE, que impuso las restricciones contra Rusia, las sanciones son un medio de presión para que cumpla las obligaciones del acuerdo de Minsk de 2015", agregó Erler.
Trump, quien será investido presidente de EEUU, sugirió en una entrevista reciente con The Times, que las sanciones impuestas a Rusia podrían derogarse si se logra un nuevo acuerdo sobre la reducción de armas nucleares.
Las relaciones entre Washington y Moscú sufrieron un notable deterioro en los últimos años.
Desde 2014, EEUU puso en marcha varios paquetes de sanciones contra ciudadanos y sectores económicos enteros de Rusia por su supuesta intromisión en la crisis que vive el este de Ucrania.
El distanciamiento se acentuó en septiembre de 2016 cuando las dos potencias no lograron un alto el fuego duradero en Siria.