13 de diciembre 2016, 13:01 GMT
Esta semana los medios estadounidenses nos rememoraron esa historia falsa. Porque como bien se sabe, nunca se encontraron tales armas químicas en Irak. El entorno del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, la recordó para compararla con la información difundida por el prestigioso diario The Washington Post sobre la presunta implicación del Kremlin en la pasada campaña electoral en el país norteamericano.
Semejantes acusaciones no son nuevas. Desde bastante antes de las elecciones se habla de que Rusia influyó en la campaña o incluso intervino para que Trump ganara. En este sentido, la respuesta más contundente a todas estas acusaciones la dio el presidente ruso, Vladímir Putin, quien dijo que quienes consideran de verdad que Rusia puede influir en la decisión del pueblo norteamericano, están dando a entender que EEUU es una república bananera.
Pero la derrota de la candidata demócrata Hillary Clinton dio un nuevo impulso a este tema. El diario estadounidense The Washington Post acusó directamente a Rusia de ayudarle a ganar a Trump. Como siempre, citó 'fuentes no identificadas'.