El nieto del expresidente chileno, electo democráticamente en 1970 y depuesto por la dictadura de Augusto Pinochet en 1973, escribió una carta abierta al Gobierno noruego para exigir que arreste a Henry Kissinger, encargado de la política exterior estadounidense en aquel momento.
"El Premio Nobel a Kissinger siempre ha sido polémico y comentado, pero me parece indignante que se lo invite nuevamente a estas alturas del siglo XXI, que mucho se ha avanzado en términos de derechos humanos. Es una forma de hacerle un lavado a su imagen y limpiar todos los crímenes", aseveró Sepúlveda, hijo de Carmen Paz, la primogénita del estadista chileno.
El descendiente del político socialista escribió una carta, que fue publicada en el periódico Aftenposten, uno de los de mayor difusión en Noruega. En la misiva, Sepúlveda detalló la manera en la que Kissinger influyó en el golpe de Estado chileno y en la sangrienta dictadura que gobernó el país durante 17 años.
"Realmente no lo van a detener ni a juzgar, pero por lo menos que se haya hecho ruido mediático ayuda a que la historia lo juzgue como lo que debe ser y como lo que ha sido: un criminal, un genocida, y que no pase a la historia como un Nobel de la Paz o un asesor de Estado", expresó Sepúlveda, quien reside actualmente en Venezuela.
Para el nieto de Allende —médico de profesión como su abuelo—, en la historia oficial "se habla muy poco del papel que tuvo EEUU" en apoyar a la dictadura chilena incluso antes del golpe de Estado y "no es tan conocido el rol que jugaron [el expresidente] Richard Nixon y Henry Kissinger" para "implantar el modelo económico neoliberal de forma sangrienta".
Entre otros episodios, mencionó el asesinato del entonces comandante en jefe del Ejército, René Schneider, por parte de grupos de extrema derecha. El militar había manifestado que "iba a respetar al presidente electo por mandato popular" debido a sus convicciones "constitucionalistas". El militar murió mientras intentaban secuestrarlo "para hacer presión" en el Congreso de modo que no ratificara a Allende en la presidencia. Según Sepúlveda, "el grupo que lo hizo y las armas con las que lo asesinan entraron por la embajada estadounidense".
Según el médico, el paro patronal realizado en 1972, que detuvo la distribución de mercaderías, también tuvo apoyo financiero de EEUU. "Fue financiado por plata norteamericana. Los camioneros ganaban el doble estando parados que trabajando, entonces les convenía estar parados".
"Kissinger estuvo detrás de la Operación Cóndor. Hay bastante documentación y se sabe de todo eso, pero se sabe en pequeños círculos. No es algo que los grandes medios rescaten. En Chile es algo que no se sabe: se habla del golpe de Estado, los militares y la derecha pero poco se debate del papel determinante que jugó EEUU", concluyó.