Las mujeres serán enterradas en el cementerio de la ciudad con todos los honores militares.

Ambas fallecidas, que trabajaban en el hospital de Birobiyán y fueron enviadas a Siria, tenían familias.
ВНИМАНИЕ!
— Армия России (@Armiya_Russii) 6 de diciembre de 2016
Надежда Дураченко и Галина Михайлова — медицинские работники из Биробиджана, погибшие при обстреле боевиками госпиталя в Алеппо pic.twitter.com/sAPxpdLmmB
El 2 de noviembre, Nadezhda Durachenko cumplió 40 años, de los cuales 20 los dedicó al campo de la medicina. Hace cuatro años comenzó a trabajar en el hospital militar.
La segunda doctora, Galina Mijáilova, tenía 39 años. Su hijo, de tan solo 15, se quedó sin madre. Según MK, era madre soltera y últimamente no vivía con el padre de su hijo.
"El chico no se va a quedar solo, porque los Mijáilov son muchos", aseguró Olga, amiga de Galina, citada por MK.
Según ella, en la familia de Mijáilova son tres hermanas. Su madre y su hermana menor también son enfermeras. La madre de Galina trabajó con ella en el hospital militar. Se sintió indispuesta al enterarse de la muerte de su hija, de ahí que la hermana de Galina fuera la encargada de identificar el cadáver.
El 5 de diciembre, el Ministerio de Defensa informó de la muerte de dos doctores militares en un bombardeo contra el hospital de campaña ruso en Alepo.
El 8 de diciembre, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, condecoró a la anestesista Mijáilova y a la enfermera operacional Durachenko con la Orden a la Valentía.