El tratado vigente desde 1994 entre Canadá, EEUU y México, "ha generado bienestar pero ha llegado el momento en que tenemos que ir más allá", dijo la secretaria de Relaciones Exteriores ante gerentes e inversionistas reunidos en el "US-México CEO Dialogue".
En la reunión del organismo bilateral creado en 2013 por la Cámara de Comercio de los EEUU y el Consejo Coordinador Empresarial de México (CCE), la canciller examinó "la importancia de facilitar el comercio a través de la frontera" entre ambos países, ante la incertidumbre creada por los planes proteccionistas de la industria estadounidense promovidos por Trump.
"Tenemos que pensar en qué va a suceder después del TLCAN o más bien qué hacemos después del tratado de libre comercio, porque si no vamos a seguir en una zona de confort y con mucha incertidumbre", dijo la jefa de la diplomacia mexicana.
Respeto más allá de coyunturas
La canciller mexicana dijo que "México está dispuesto a trabajar con la nueva administración (de Trump) sobre la base del respeto mutuo, confianza y entendimiento como se ha hecho con los diferentes gobiernos".
La diplomática aseguró ante empresarios de México y EEUU que la relación entre los dos países "va más allá de gobiernos, trasciende coyunturas políticas", dijo ante el principal consejo de negocios del sector privado, para fortalecer los lazos económicos y comerciales entre ambos países.
Contrario a los anuncios de penalizaciones a las empresas que inviertan en México y aranceles a las exportaciones a EEUU, el tema del libre comercio "es una prioridad central y un elemento clave para mejorar la competitividad empresarial, la estabilidad económica y el crecimiento en ambas naciones".
La canciller mexicana fue un paso adelante, con la agenda pendiente de parte de México en las negociaciones de 1994, y señaló que los tres países "tenemos que explorar nuevos caminos, tenemos que pasar de la movilidad de bienes a la movilidad de trabajo, de la circulación a la inversión en cerebros y de talentos".
Como un ejemplo, Ruiz Massieu mencionó que desde el año 2015 más de 67.000 estudiantes mexicanos, investigadores y profesores han viajado a EEUU con el programa "Proyecta 100 Mil".
Ese programa "aumenta la oferta regional de talento y abre un nuevo nivel de integración, competitividad, así como crecimiento incluyente", ilustró.
La canciller invitó al sector privado de los países de TLCAN a "sumarse a contribuir como aliados, como personas con gran influencia".
Los países atraviesan por "estos tiempos de cambio, por lo que el diálogo entre Gobierno y el sector privado es esencial para que esto llegue a ambos lados de la frontera".
El grupo convoca empresas estadounidenses y mexicanas que están comprometiendo recursos e invirtiendo en ambos mercados para abogar por el comercio bilateral y la relación comercial.
En el evento estuvieron presentes empresarios y autoridades de ambos gobiernos.
Entre los asistentes estuvo el vicecanciller mexicano para América del Norte, Paulo Carreño; la embajadora de EEUU en México, Roberta Jacobson; el presidente del Consejo de la Administración del industrial Grupo Alfa, Armando Garza, y el vicepresidente del Consejo de General Electric, John G. Rice, entre otros inversionistas.