"Las señales que ha dado Donald Trump hasta ahora no son buenas. Son gestos muy virulentos en términos de un entendimiento con la isla y del proceso que el presidente Barack Obama inició con Cuba", dijo a Sputnik Arturo López Levy, catedrático en la Universidad de Texas y experto en política latinoamericana y estadounidense.
El 28 de noviembre, Trump publicó en su cuenta de Twitter: "Si Cuba no está dispuesta a lograr un mejor acuerdo para el pueblo cubano, para los cubanoestadounidenses y para EEUU como un todo, terminaré con el acuerdo".
If Cuba is unwilling to make a better deal for the Cuban people, the Cuban/American people and the U.S. as a whole, I will terminate deal.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 28, 2016
Para Levy la visión del próximo presidente de Estados Unidos acerca de que Cuba no ha hecho "concesiones" o de que será él mismo quien vaya a "dictar desde Washington el sistema político cubano", parten de una visión "muy poco realista".
"Aunque hay una gran disparidad de poder entre ambas naciones, la relación entre ellas no es imperial. Cuba no está esperando que Estados Unidos le de directivas de cómo debe organizarse", precisó el catedrático.
Al día siguiente de la muerte del revolucionario cubano, Donald Trump tuiteó un controversial mensaje: "¡Fidel Castro ha muerto!"
Fidel Castro is dead!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) November 26, 2016
Para Levy, el hecho de que Fidel Castro no esté presente como líder puede repercutir en un análisis "menos apasionado" del tema cubano porque ningún otro político cubano genera "tanta lealtad" y "simpatía" entre sus seguidores y "antipatía" y "encono" entre sus adversarios como él. "Queda por ver, sin embargo, cuál va a ser la visión de Trump en este sentido", concluyó Levy.