Empresas como Nike, eBay, Starbucks, Mars, Levi Strauss & Co. y Tiffany & Co., con ingresos anuales superiores a los 100 millones de dólares, piden que se continúe la participación de EEUU en el acuerdo de París, y hacen un llamado para invertir en una economía baja en carbono.
"Queremos que la economía de EEUU sea eficiente en energía y sea alimentada por energía baja en carbono. Soluciones rentables e innovadoras nos pueden ayudar a alcanzar estos objetivos", declaran en la carta.
Además, advierten que "el fracaso en construir una economía baja en carbono pone en riesgo la prosperidad estadounidense, pero que la acción correcta ahora creará empleos y aumentará la competitividad del país".
"El cambio climático, la escasez de agua y la deforestación son graves amenazas para la sociedad. Es imperativo que los negocios globales, como Mars, hagan su parte para enfrentar esas amenazas", aseguró Barry Parkin, director de sustentabilidad, salud y bienestar de Mars Incorporated.
Otra de las acciones, ha llegado de parte de las grandes compañías petroleras más importantes a nivel internacional como BP, Total, Royal Dutch Shell, Repsol, Saudi Aramco, Statoil, Eni, Reliance, Pemex y CNPC.
A principios de noviembre estas diez empresas acordaron invertir 1.000 millones de dólares en los próximos diez años para desarrollar y acelerar el despliegue comercial de tecnologías innovadoras de bajas emisiones.
"Estamos personalmente comprometidos a garantizar que, trabajando con otros, nuestras empresas desempeñen un papel clave en la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, mientras siguen proporcionando la energía que el mundo necesita", aseguraron en una declaración conjunta.
Estas petroleras juntas suministran un quinto de toda la producción de gas y petróleo y abastecen aproximadamente el 10 por ciento de la energía mundial.