"Si empiezan a gravarlas con 35% (las importaciones), y todas las compras aumentan un 15, o un 20%, se destrozaría la economía americana con una inflación brutal", dijo el dueño de la telefónica América Móvil, al cerrar una reunión anual de la Fundación Círculo de Montevideo, que reúne a exmandatarios de Iberoamérica.
Slim considera que si se cumplieran las amenazas de Trump, "de que todo lo que compra el país subiera 35% de precio, por un impuesto que se impusiera, son propuestas que no se pueden contemplar como reales", descartó el multimillonario ante el foro que integran Felipe González, Julio María Sanguinetti, Jorge Quiroga y Belisario Betancourt entre otros.
"Es lógico que EEUU busque fabricar bienes estratégicos con alto valor agregado —prosiguió—, porque no puede competir con bienes importados con costes marginales tan bajos", explicó.
Sin embargo, Slim cerró su comentario con un refrán popular de su país: "como decimos en México, no es lo mismo ser cantinero que borracho".
Y para terminar de burlarse del "elevado y hermoso muro" que Trump ha jurado construir, acotó: "Ya saben, también se construyen túneles" bajo la frontera.
Trump denunció a mediados de octubre que Slim, de 75 años, era un donante y orquestador de la campaña de su rival demócrata Hillary Clinton, y que manipulaba la línea editorial del diario The New York Times, del cual posee un 17% de las acciones.
Un portavoz del magnate dijo que las contribuciones a la Fundación Clinton son públicas: "Claro que no estamos interfiriendo en las elecciones de EEUU, ni siquiera estamos activos en la política mexicana", puntualizó.