Según ha señalado el propio Gobierno, en la actualidad se evalúan 410 propuestas de los promotores del "No" con las cuales buscan modificar el Acuerdo Final de Paz que se firmó con las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) el pasado 26 de septiembre en Cartagena, en el norte del país.
"Hoy comenzamos revisión de bitácora con propuestas para llevar y discutir en La Habana", publicó este jueves la delegación, antes de informar de que aplazaba para el viernes su encuentro con los delegados de las FARC.
"Sugiero una pausa prudente en los diálogos mientras el Presidente Juan Manuel Santos define su posición frente a la realidad de un nuevo acuerdo", escribió Pastrana en su cuenta de Twitter.
Sugiero una pausa prudente en los diálogos mientras el Presidente @JuanManSantos define su posición frente a la realidad de un nuevo acuerdo
— Andrés Pastrana A (@AndresPastrana_) 3 de noviembre de 2016
"Entrelazados con el anhelo de todos los colombianos, estamos dispuestos a redactar y firmar lo más rápido posible el nuevo acuerdo de paz", escribió el líder guerrillero.
El aplazamiento del viaje a La Habana por parte de la delegación del Gobierno coincide con las afirmaciones que en la víspera hizo el exprocurador Alejandro Ordóñez, según las cuales los impulsores del "No", de los que él forma parte, y el Gobierno no han logrado concretar acuerdos precisos sobre temas fundamentales, necesarios para comenzar un nuevo ciclo de conversaciones con la guerrilla y lograr un nuevo acuerdo de paz.
Desde la semana pasada los voceros del "Sí" y del "No" mantienen reuniones en el Ministerio del Interior para abordar los puntos más importantes de la renegociación.
El Gobierno y las FARC desarrollaron una mesa de diálogos durante casi cuatro años en La Habana con el objetivo de poner fin a una confrontación armada de más de medio siglo de existencia, pero ante el triunfo del "No" ha sido necesario sentarse de nuevo a la mesa para atender las peticiones de los sectores que rechazaron el primer acuerdo.
La administración de Santos confía en que antes de que termine el año se pueda llegar a una renegociación efectiva y se puedan implementar en la práctica los acuerdos de paz.