Esta última ronda de pruebas se lleva a cabo antes de que el primer escuadrón de aeronaves sea desplegado en Japón en los próximos meses.
El F-35B es la única versión capaz de realizar aterrizajes y despegues verticales. Para probar su capacidad, los ingenieros y pilotos realizaron las pruebas en las agitadas costas de San Diego, con olas de hasta dos metros, indica el artículo publicado en la web oficial de la Armada de EEUU.
Los ensayos continuarán durante las próximas tres semanas, en las que se comprobará el rendimiento del 'software' de la aeronave, así como sus capacidades de despegue y aterrizaje.
El teniente general Jon Davis, comandante adjunto de la Aviación de la Marina, expresó que el F-35B "es el avión más versátil, ágil y tecnológicamente avanzado en los cielos hoy en día". El oficial agregó: "Mientras modernizamos nuestra aviación en búsqueda del despegue corto y el aterrizaje vertical, el F-35B sigue siendo la piedra angular que acapara nuestros esfuerzos".