"De momento no veo premisas para un encuentro ministerial, por supuesto, lo deciden los ministros, la situación se puede cambiar de manera bastante rápida, claro que todo depende de cómo evolucionaría la situación sobre el terreno", dijo el diplomático.
El viceministro resaltó que de momento la tarea principal es "hacer que se respeten los acuerdos ya logrados".
Agregó que los expertos de Rusia y de otros países que celebraron en Lausana un encuentro de dos días "entienden perfectamente las circunstancias".
"Cumplimos los acuerdos en su totalidad y Damasco también los cumple", dijo a los periodistas.
Destacó, que para lograr el retorno de una pausa humanitaria en Siria se precisa un comportamiento adecuado de la oposición.
"La pausa humanitaria concluyó el sábado, está claro que para poder volver a este régimen es necesario que nuestros oponentes garanticen un comportamiento adecuado de los grupos antigubernamentales, los cuales, en particular, frustraron la evacuación médica, prevista durante la pausa humanitaria", aseveró a la prensa el alto diplomático.
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Este domingo fue lanzada una nueva ofensiva, tras tomar el control de las alturas estratégicas donde se ubica una base militar de defensa antiaérea y una torre de comunicaciones de las fuerzas gubernamentales sirias.
Los terroristas están oponiendo fuerte resistencia, atacando con morteros las posiciones del Ejército.
La operación comenzó unas horas después de finalizar la pausa humanitaria, que estuvo vigente en la ciudad por tres días y que permitía a los radicales abandonar los distritos orientales de Alepo.
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Siria vive desde 2011 un conflicto en el que el Ejército gubernamental se enfrenta a grupos armados de la oposición y organizaciones terroristas, entre ellas Daesh (autodenominado Estado Islámico) y el Frente al Nusra (actualmente, Frente Fatah al Sham), ambos proscritos en varios países, entre ellos Rusia.
Desde su comienzo, la guerra en Siria provocó entre 300.000 y 400.000 muertos, según altos cargos de la ONU.