"La gente que ama su libertad debe salvar a Bruselas de la sovietización, de la gente que quiere decirnos con quién tenemos que vivir en nuestros países", afirmó el primer ministro en Budapest, durante el discurso dedicado al aniversario de la revolución húngara de 1956.
"Queremos ser una nación europea, no una nación dentro de Europa", explicó.
El político había criticado en varias ocasiones la política migratoria europea. Así, el 21 de octubre, Orban declaró que el debate sobre las cuotas obligatorias para la acogida de refugiados en la UE había llegado a un callejón sin salida.
Anteriormente, Hungría había celebrado un referéndum sobre la política de distribución de refugiados en la UE. Sin embargo, la escasa afluencia a las urnas hizo fracasar la consulta. Solo el 40% de los ciudadanos del país participó, mientras que, para que el plebiscito fuera válido, se requería una participación electoral de al menos el 50%. No obstante, el 98% de los votantes respondió negativamente a la pregunta sobre el derecho de la UE de distribuir las cuotas sin la aprobación del Parlamento nacional.
#Hungría mantendrá su rechazo a las cuotas de #refugiados https://t.co/983J6SEOJ4 pic.twitter.com/2L4b89FUkR
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) October 3, 2016
Europa está viviendo la mayor crisis migratoria desde los tiempos de la II Guerra Mundial. Según Frontex, en 2015, 1,8 millones de refugiados han arribado a la UE. La mayoría de ellos llega a Grecia a través de Turquía y luego se dirige a otros países.