
El 6 de octubre, el Ministerio de Defensa de Rusia también se refirió a estas filtraciones, que podrían ser el preludio de futuras acciones de EEUU.
"Varios medios occidentales han publicado 'filtraciones' sobre las conversaciones mantenidas por la Administración de la Casa Blanca sobre la posibilidad de lanzar misiles y llevar a cabo ataques aéreos contra las posiciones del Ejército sirio", declaró el portavoz del ministerio, el general mayor Ígor Konashénkov.
Además, el portavoz del Ministerio tachó de "ilusiones de los opinadores 'amateurs'" las esperanzas de que las aeronaves "invisibles" puedan evitar los misiles S-300.
El teniente general Aitech Bizhev, vice comandante en jefe de la Fuerza Aérea de Rusia, precisó que la eficiencia del sistema de misiles antiaéreos depende de la cantidad de misiles disponibles.
"Por lo general, el S-300 y el S-400 disponen de un arsenal de tres pertrechos de misiles. Esto es mucho, teniendo en cuenta la alta probabilidad de destrucción del objetivo con el primer acierto. La experiencia de las guerras locales muestra que durante un ataque aéreo masivo, con la destrucción del 20% de la aviación enemiga tras el primer ataque, se detienen todas las acciones de combate del enemigo", comentó el experto en una entrevista para el diario ruso Vzglyad.

"Dudo que la aviación de nuestro supuesto enemigo disponga de una escuadrilla de kamikazes [pilotos suicidas]", agregó el teniente general.
Según Bizhev, para suprimir los sistemas rusos de defensa antiaérea desplegados en Siria hay que realizar todo un conjunto de medidas. También hay que tener en cuenta el ámbito de cobertura del radar de funcionamiento continuo, gracias al cual ningún objeto volador puede pasar desapercibido.
"Queda al descubierto cualquier objeto a 600-700 km del aeródromo. En cuanto el objeto volador aparece dentro del alcance, los batallones antiaéreos se ponen en disposición de combate. Estas [disposiciones] no solo incluyen los sistemas de misiles antiaéreos, sino también los sistemas de misiles del tipo Pantsir", explicó el experto.
Así es como la eficiencia extrema del #S300 aumentará las posibilidades rusas en #Siria https://t.co/JUUsjHg4mj pic.twitter.com/JSaDcNat44
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) October 5, 2016
Por lo tanto, cualquier blanco no identificado que vuele en dirección a la base de Hmeymim será destruido al entrar en la zona de alcance de la defensa aérea.
"Nuestros sistemas de defensa de misiles son capaces de destruir cualquier objetivo aéreo a cualquier velocidad a pesar de las medidas de resistencia o interferencia de cualquier tipo. El alcance destructivo de nuestros sistemas de defensa aérea es de hasta 400 km", afirmó.
"Como sabemos, normalmente, la aviación del supuesto enemigo prefiere realizar un lanzamiento masivo de misiles sin entrar en la zona de contacto de la defensa aérea, para poder abrir pasillos de vuelo y perforar un agujero en la defensa aérea", explicó.
"El S-300 VM2 está diseñado precisamente para repeler este tipo de ataques", añadió el teniente general, confirmando las advertencias del Ministerio de Defensa de Rusia.
Asimismo, aseguró que el grupo aéreo de Rusia no va a esperar en el aeródromo, sino que se dispersará en el aire para repeler los ataques.
"No envidio a los que se arriesguen a meterse en la zona de contacto", concluyó el teniente general.