Roscosmos se propone poner en servicio los cohetes Protón Light en el año 2020, y los Sunkar hacia el 2025.
Ambos modelos partirían al espacio desde la base de Baikonur y la empresa kazajo-rusa Bayterek sería la operadora de estos lanzamientos, lo que facilita en principio el arriendo de terrenos en Rusia y Kazajistán para la caída de primeras etapas.
China mantiene una relación amistosa con Rusia pero, a la hora de negociar, procura obtener concesiones importantes.
Así, se mostró dispuesta a compartir la tecnología de chips resistentes a la radiación, que Rusia no puede importar de EEUU a causa de las sanciones, pero pidió a cambio traspasarle la tecnología de motores de propelente líquido para cohetes o, mejor aún, construir la planta correspondiente en territorio chino.