Las nuevas versiones podrán "garantizar la eficacia económica a la hora de colocar aparatos espaciales de clase ligera y media en órbitas geoestacionarias y reforzar al Protón comercialmente en el mercado de lanzamientos", apuntó Roscosmos en su página de Facebook.
Los futuros lanzadores serán "versiones optimizadas del Protón-M, de dos etapas" y se usarán exclusivamente para lanzamientos comerciales en el marco de los contratos suscritos por International Launch Services (ILS), subsidiaria de Jrúnichev.
El primer lanzamiento de un Protón de clase media está previsto para el año 2018. La versión ligera se estrenará al año siguiente.