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Balas inteligentes
La frase "Las balas son tontas" le es atribuida al notorio general ruso del siglo XVIII Alexandr Suvórov, más conocido por ser uno de los pocos grandes generales de la historia que nunca perdió una batalla. Cuál sería su sorpresa si viviera hoy en día y pudiera atestiguar en lo que se han convertido esos simples proyectiles.
Parece que se trata de un pequeño misil, pero con un calibre de 12,7 mm sería de dimensiones similares a los proyectiles que se usan en ametralladoras pesadas o en rifles de francotirador. Los propios creadores de esta munición la llaman "complejo reactivo de francotirador con proyectil controlable", y ya han informado de que este podría alcanzar con certeza objetivos a una distancia de entre 8 y 10 km.
Avatar entra en servicio
Durante una de las pruebas a las que fue sometido, Avatar mostró su destreza al volante de un cuadriciclo —o quad—, realizó certeros disparos con un rifle de francotirador e hizo un hábil recorrido por el circuito del polígono.
Sus diseñadores esperan que en un futuro próximo, el robot sea capaz de realizar tareas simples, como moverse autónomamente por el campo de batalla, superar diferentes obstáculos, cubrir a los soldados, así como hacer más precisos los disparos contra el enemigo o evacuar a los heridos de la línea de fuego.
Cañón de riel
El cañón de riel es un arma electrónica que por medio de un fuerte campo magnético impulsa proyectiles a unas velocidades difíciles de alcanzar mediante otros medios. La forma en la que funciona se asemeja mucho al famoso Gran colisionador de hadrones, solo que en vez de átomos utiliza objetos metálicos como proyectiles. Se sabe que EEUU viene trabajando en este tipo de cañones al menos desde 2008.
Alexei Shurupov, director del Instituto de Altas Temperaturas de la Academia de Ciencias de Rusia, dice que en Rusia también se llevan a cabo experimentos de este tipo, que podrían en un futuro próximo hacer realidad este tipo de armas.
Mediante las pruebas, dice, se han logrado lanzar pequeños proyectiles hasta la conocida como 'velocidad de escape' —poco más de 11 kilómetros por segundo, que es la velocidad mínima con la que debe lanzarse un cuerpo para que 'escape' de la atracción gravitatoria de la Tierra—.
Sin embargo, uno de los inconvenientes que aún no permite el uso masivo de esta arma es el rápido deterioro que sufre el cañón magnético. Es por ello que los científicos se encuentran ahora investigando materiales capaces de soportar las cargas y fuerzas a las que se somete el ingenio, pero dicen estar convencidos de que este problema será resuelto.
Rátnik
Inject: El traje ruso de combate Rátnik incluirá nuevos avances tecnológicos en 2016
Rusia se encuentra ahora desarrollando la tercera generación del Rátnik. El equipamiento del 'soldado del futuro' contará, entre otras cosas, con un sistema de control por voz. Según sus desarrolladores, el equipo no difiere de los sistemas de reconocimiento de voz de los que dispone su teléfono.
En el campo de batalla, esto permitirá tanto a soldados como a oficiales controlar tareas de combate —como el cambio de munición automático, la búsqueda de rutas de evacuación o la proyección de las posiciones enemigas, por ejemplo— a través de simples órdenes que el sistema reconocerá y ejecutará.
"Este complejo equipamiento personal permitirá a nuestro soldado ganar segundos frente a su contrincante, aumentando sus posibilidades de supervivencia en el campo de batalla", indica Konstantín Lamin, director de Titan.
Para casos especiales, los diseñadores ya están considerando agregar la posibilidad de control del Rátnik a través de los gestos.