En particular, entre las empresas sancionadas figuran varias sucursales de Gazprom y la compañía Mostotrest, vinculada con la construcción de un puente sobre el estrecho de Kerch que unirá Crimea con el resto de Rusia.
En particular, en la lista figuran varios funcionarios de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, así como ocho ministros del Gobierno de Crimea.
El Tesoro estadounidense vinculó las nuevas sanciones con la realización de los Acuerdos de Minsk y la situación en Crimea.
Asimismo subraya que el Gobierno de EEUU mantiene "su firme negativa de reconocer la anexión intentada de la península".
Las relaciones entre Rusia y Occidente se complicaron a raíz de la situación en Ucrania, la adhesión de Crimea a Rusia tras un referéndum celebrado en marzo de 2014, que los países occidentales calificaron de "anexión ilegal".
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A finales de julio de este mismo año la Unión Europea y EEUU pasaron de las sanciones impuestas contra individuos y compañías a aplicarlas contra sectores enteros de la economía rusa, a lo que Moscú reaccionó con un embargo alimentario de productos procedentes de EEUU, la UE, Australia, Canadá y Noruega.
Kiev, EEUU y la UE han acusado a Moscú en reiteradas ocasiones de injerencia en Ucrania, hecho que es negado por Rusia, que declara no ser parte del conflicto interno ucraniano, no estar vinculada a los sucesos del sudeste ucraniano y estar interesada en que Ucrania supere su crisis política y económica.