"Bulgaria y Rusia acordaron crear grupos de trabajo para recuperar los proyectos de energía rusos, incluso la construcción del gasoducto South Stream", declaró el ministro, citado por la agencia Bloomberg.
El 5 de agosto el presidente ruso, Vladímir Putin, durante una conversación telefónica con Borísov debatió los asuntos de cooperación bilateral, centrándose en la realización de los proyectos conjuntos en el sector de energía.
Debido a la posición no constructiva de la Unión Europea (UE), Rusia anunció en diciembre de 2014 que se negaba a construir el gasoducto South Stream (que debía pasar por Bulgaria, Serbia y Hungría) y que tendería otro, Turk Stream, proyecto que también se congeló debido a la crisis en las relaciones entre Moscú y Ankara, provocada a finales de 2015 por el derribo de un avión militar ruso por la Fuerza Aérea turca en territorio sirio.