Obama apuntó que su cabello "se volvió cano" después de los muchos esfuerzos que Washington ha emprendido para conseguir la paz en Siria.
"Prácticamente estoy seguro de que la mayor parte de mi cabello cano es fruto de tantos encuentros sobre Siria", ironizó.
El presidente estadounidense declaró que duda poder confiar en Rusia y Vladímir Putin en términos de la resolución del conflicto sirio, de modo que un posible fracaso de la tregua pesará sobre la conciencia del país eslavo.
Dado que la situación en Alepo empeora cada día, el político norteamericano considera que el Kremlin debe demostrar que está dispuesto a solucionar el conflicto y cumplir con sus compromisos.
Por su parte, el vicecanciller ruso, Serguéi Riabkov, subrayó que Rusia "aún espera más acciones de los socios estadounidenses que realmente contribuyan a coordinar los esfuerzos para combatir a Daesh y el Frente Frente Fatah al Sham —antiguamente llamado Frente al Nusra— y crear, paralelamente, las premisas para continuar las negociaciones en Ginebra bajo la coordinación del enviado especial de la ONU sobre Siria, Staffan de Mistura"