El presidente de EEUU, Barack Obama, volvió a criticar la actividad de Rusia en Siria, dijo no estar seguro de que se pueda "confiar en los rusos" y que el probable fracaso de la tregua en Siria pesará sobre la conciencia de Moscú.
"Creo que la operación en Alepo toca a su fin, la Fuerza Aeroespacial Rusa y el Ejército de Siria operan con mucha eficacia, el poder de Bashar Asad se consolida, lo que no puede menos que provocar mucha irritación en Washington", comentó el senador a RIA Novosti.
Uno de los objetivos principales que EEUU persigue en Siria es la destitución de su presidente, Bashar Asad, pero los acontecimientos de estos últimos tiempos lo hacen poco probable, señaló.
"EEUU está interesado en destituir a Asad y sembrar el caos en el país, pero Rusia no se lo permite ni permitirá", recalcó.
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Precisamente la frustración de este plan destructivo provoca la reacción crítica de Obama, resumió el senador.