Las víctimas celebraban en los alrededores de la 'Promenade des Anglais' (el Paseo de los Ingleses), emblemática vía que el día del festejo se encontraba clausurada para el tránsito automotriz.
Según los testimonios, el asaltante condujo el camión zigzagueando por el paseo con el fin de atropellar la mayor cantidad de personas. Durante la masacre murieron más de 80 personas de al menos 6 países diferentes y otras 200 resultaron heridas.