"No sentimos presión por parte de la Unión Europea a los cuatro países de la UE —Alemania, Suecia, Dinamarca y Finlandia— por cuyas zonas económicas exclusivas deberá pasar el gasoducto Nord Stream 2", señaló el portavoz del consorcio Jens Mueller.
La empresa, apuntó, sabe que debe cumplir la legislación de la UE en este ámbito.
Müller destacó que Estonia, Letonia, Lituania y Polonia, que previamente se opusieron al proyecto Nord Stream 2, no podrán bloquearlo a la hora de coordinar la construcción de la tubería con los países europeos cuyas zonas económicas atravesará.
"Estonia, Letonia, Lituania y Polonia no podrán bloquear el proyecto solo porque no quieren que se realice; si hay un impacto ambiental transfronterizo, entonces cinco países —Alemania, Dinamarca, Rusia, Suecia y Finlandia— deberán revisar esta información con atención antes de tomar la decisión final sobre la autorización (de la construcción de tubería)", subrayó.
El gasoducto Nord Stream 2, en cuya construcción participan la rusa Gazprom, las alemanas Uniper y BASF, la anglo-neerlandesa Shell, la austriaca OMV y la francesa ENGIE, conectará a Rusia y Alemania por el fondo del mar Báltico.
El proyecto consta de dos etapas con una capacidad total para transportar 55.000 millones de metros cúbicos de gas al año.
En contra de este plan se pronunció enérgicamente Ucrania, país que teme dejar de ser la vía más importante de tránsito del gas ruso a Europa.
Lea más: "Nord Stream 2 tendrá gran importancia para Europa"
Además, Letonia, Lituania, Estonia, Polonia, Hungría, Rumanía y Eslovaquia enviaron a finales de 2015 una carta a Bruselas, señalando que la realización de ese proyecto aumentaría la dependencia de Europa del gas ruso, debilitaría la seguridad energética de la UE y desestabilizaría aún más la situación en Ucrania.