"Las vías democráticas unilaterales, acompañadas por una movilización popular intensa, sostenida y prolongada pueden superar legítimamente los obstáculos constitucionales", ha dicho Romeva en la inauguración de 'La justicia de la secesión', una jornada organizada por el Centro de Estudios de Temas Contemporáneos adscrito a su departamento.
Para Romeva, la unilateralidad es legítima después de que las vías "negociadas y constitucionales" hayan sido "sistemáticamente negadas", como ocurriría, en su opinión, en el caso catalán.
Y ha añadido que una nación puede erigirse como pueblo constituyente y empoderarse para formular "nuevas bases de convivencia".
En la jornada, celebrada en Barcelona, han participado: la profesora de la Universitat Pompeu Fabra Neus Torbisco; el profesor titular de Filosofía Moral y Política de la Universitat de Girona, Joan Vergés; el profesor de Derecho Constitucional de la Universitat Pompeu Fabra, Héctor López; el miembro del Instituto de Estudios de Autogobierno, Marc Sanjaume; y el autor del libro 'Justicia y legalidad de la secesión', Pau Bossacoma.
Una consulta unilateral para desbloquear la situación política
El 30 de junio la Candidatura d'Unitat Popular (CUP) pidió al presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, que convocase una cumbre para acordar un referendo unilateral de independencia.
La CUP ha pedido que se sumen a la propuesta Junts pel Sí (JxS) y la izquierda federalista de los socialistas catalanes del PSC, Catalunya Sí Que Es Pot (CSQEP) y En Comú Podem (ECP).
Según la formación independentista de la izquierda radical, las elecciones generales han evidenciado que el cambio político "no ha sido posible" en el Estado español y, por lo tanto, "no hay espacio para el referendo".
En la que fue una de las primeras reacciones al recuento de votos de las elecciones generales de pasado domingo, la CUP pidió la convocatoria de un referendo unilateral de independencia.
"Ahora es la hora del referendo unilateral de independencia", escribió el partido en su cuenta de Twitter.
#RUI "Volem exercir l'autodeterminació abans d’esgotar aquesta legislatura excepcional” https://t.co/pkZ3DHy3vV pic.twitter.com/FVAy8e98Qa
— CUP #sensepor (@cupnacional) 4 de julio de 2016
Varios cargos de la CUP mantuvieron las semanas anteriores a los comicios que los resultados serían muy similares a los de las anteriores elecciones y, por lo tanto, no sería posible la celebración de una consulta pactada con un nuevo Gobierno en Madrid.
Como medida de desbloqueo, Gabriel propuso que la Generalitat convocase de manera unilateral, es decir, sin consentimiento del Estado central, un referendo de secesión.
La CUP cuenta actualmente con 10 diputados en el Parlamento catalán.
Días después, Gabriel volvió a insistir en declaraciones al programa 'El matí de Catalunya Ràdio' de la emisora de radio pública catalana en la convocatoria de un referendo unilateral.
La político independentista dijo que su formación había tenido ya contactos con Junts pel Sí —coalición entre Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), en el Gobierno- y las organizaciones soberanistas de la sociedad civil para incluir esta medida en la hoja de ruta independentista.
"Hay buena sintonía, el RUI no es partidista ni orgánico, es un instrumento democrático", afirmó al agregar que no se forzará una fecha concreta: "Se trata de encontrarse y readaptar la hoja de ruta", comentó.
Un total de 36.518.100 votantes, 197.247 más que en las elecciones del 20 de diciembre, estaban llamados a las urnas el 26 de junio en unos comicios que eran vistos por muchos como una segunda vuelta y de los que se esperaba desbloquear políticamente la falta de acuerdo para formar Gobierno.