La inflación general anual se mantiene en niveles inferiores a la meta permanente fijada por las autoridades mexicanas, "si bien la variación anual del índice subyacente ha continuado mostrando una tendencia al alza, situándose en la primera quincena de junio en niveles cercanos al 3%", dijo el banco en un informe.
La moneda mexicana se debilitó un 4,40% frente al dólar entre el jueves y el lunes en su cotización interbancaria, tras el referendo en el Reino Unido que dio luz verde a su salida de la Unión Europea y llegó a un pico anual de 19,12 pesos el martes frente cada unidad de billete verde.
Con esa tendencia se disipan por el momento los temores de que la debilidad del peso afecte las metas de inflación.
Al respecto, hasta el momento, "no se han presentado efectos de segundo orden en el proceso de formación de precios de la economía", dice el banco central.
Las expectativas de inflación provenientes de encuestas y las extraídas de cotizaciones de mercado, tanto para horizontes de corto como de mediano y largo plazo, "continúan ancladas", dijo Banxico.
Para los siguientes meses, se espera que la inflación general anual aumente gradualmente para cerrar el año ligeramente por arriba del 3%: "En todo caso, es previsible que el promedio anual se ubique prácticamente en dicha cifra" puntualiza el banco central.
En particular, en abril de 2016 se acentuó la atonía de la producción industrial, en parte como reflejo del comportamiento adverso de las exportaciones manufactureras, a la vez que los servicios se desaceleraron.
Por otra parte, "si bien los indicadores oportunos del consumo privado mantienen un elevado ritmo de crecimiento, la inversión fija bruta siguió registrando un desempeño débil".
En este contexto, no se perciben presiones sobre los precios provenientes de la demanda agregada, dadas las condiciones de relativa holgura que todavía presenta la economía.