La pequeña estuvo inconsciente en la orilla del lago hasta el día de hoy, según sus declaraciones. Tras recuperar la conciencia, se dirigió hacia al pueblo más cercano.
"Encontró a un niño cubierto de sangre e incapaz de moverse en el camino. Memorizó el lugar del incidente y, al llegar al pueblo, pidió a uno de los residentes llamar a los socorristas", agregó la fuente.
El 18 de junio fue organizado un paseo en botes para los niños que descansaban en el campamento Park Hotel Syamózero, el grupo turístico era de 51 personas, 47 de ellas eran niños, huérfanos en su mayoría. Inesperadamente estalló una tormenta que causó la tragedia.
Los menores llegaron al campamento de verano Kudama desde Moscú. Las autoridades de la República rusa de Carelia han decretado el 20 de junio como un día de luto por las víctimas del naufragio.
El jefe de Gobierno de Carelia, Alexandr Judilainen, expresó sus condolencias a los familiares de las víctimas y anunció que las autoridades de la república están preparadas para recibirlos y prestar toda la ayuda necesaria. Además, recibirán una ayuda material de un millón de rublos (más de 15.000 dólares).