“La reunión de junio entre la OPEP y otros productores de petróleos baratos no tendrá necesidad de hacer ninguna decisión de congelar la producción a los niveles de enero 2016, sino que el mercado se va a encargar de nivelar los precios del barril en torno a los 40 y 50 dólares”, afirmó.
El experto pronosticó que hacia finales de este año habrá una disminución de 1,9 millones de barriles diarios en el mercado, debido al retiro de productores de petróleos caros, como los obtenidos a través del “fracking” (fractura hidráulica), fundamentalmente de EEUU, y los de aguas profundas, que no pudieron sostenerse frente a los crudos más baratos, sobre todo de las naciones del Golfo.
Los miembros de la OPEP tienen previsto reunirse el mes próximo en la capital austriaca para analizar una propuesta de congelar la producción en los niveles de enero y así empujar al alza los precios internacionales, que cayeron de 115 dólares por barril de 159 litros a mediados de junio de 2014 a poco más de 40 en la actualidad.
La OPEP, que cubre un tercio del mercado mundial, está integrada por Angola, Arabia Saudí, Argelia, Catar, Ecuador, Emiratos Árabes Unidos, Indonesia, Irak, Irán, Kuwait, Libia, Nigeria y Venezuela.