ANKARA (Sputnik) — Entre las 12 personas muertas que viajaban de Turquía en dos botes con destino a Grecia se encontraba un niño kurdo, Aylan Kurdi, hallado en la playa, cuya imagen provocó una enorme repercusión en los medios occidentales y una gran polémica sobre la crisis migratoria.
Según los datos de la agencia europea Frontex, más de 1,83 millones de refugiados llegaron a la UE en 2015, una crisis migratoria que la Comisión Europea ha calificado como la peor desde la II Guerra Mundial.
Anteriormente las autoridades de Turquía declararon que plantean hacer más estrictas las penas por tráfico de personas que serán igualadas a las de terrorismo.
Desde principios de año la policía detuvo a 204 personas acusadas de tráfico ilegal de inmigrantes.